Durante años, nuestro cuerpo ha sido receptor de ingredientes que han intoxicado nuestra piel, cuero cabelludo y cabello, lo que ha provocado que se resequen con tensoactivos y emulsionantes agresivos. Para solventar este problema, hemos intentado hidratarlos y nutrirlos con siliconas derivadas de petróleo no solubles en agua con efecto flash, que los han impermeabilizado de manera superficial. Por tanto, piel y cabello han sido privados del agua e hidratación necesarios durante demasiado tiempo y esto ha provocado necesidades que nunca se terminan de satisfacer, sin olvidar el efecto coctel tóxico al que estamos sometidos, incluyendo los disruptores endocrinos camuflados en conservantes, perfumes, etc
Pero, ¿cómo podemos solucionarlo? Con cosmética 100% ecológica. Necesitamos alrededor de 21 días para desintoxicar las partículas residuales y así notar los efectos reales de los productos ecológicos y comenzar a reavivar y recuperar nuestro propio colágeno, elastina, vitaminas, lípidos y antioxidantes, entre otros.
¿Qué vamos a notar?
Respecto al cabello, haceros una pregunta, cuantas veces te has quejado de lo poco que te dura limpio el cabello, de la falta de brillo, del encrespado, de la caída excesiva, debilidad caspa, etc.
Piensa que la mayoría de las veces por no decir siempre tienen la culpa los tóxicos.
Los productos convencionales obstruyen el poro del cuero cabelludo y lo saturan de impurezas provocando suciedad excesiva provocando debilidad del bulbo y folículo piloso, caída, opacidad, grasa o caspa, sequedad, encrespado, rotura, en fin, un círculo vicioso difícil de controlar y conseguir el objetivo de un cabello saludable.
En el proceso de cambio al principio podemos notar sensaciones como la falta de espuma en el lavado, sequedad, enredos y/o caída que no es real, es el daño colateral de haber tenido el cabello sometido a sintéticos pegando, apelmazando y privando de agua al cabello pero esto va mejorando cada día y notaremos más sensación de limpieza, oxigenación , fortaleza, brillo natural, soltura, fuera picores, tiranteces, y lo mejor! La sensación de que mi cabello no pesa… fruto de habernos liberado de una mochila toxica que nos oprime desde la cabeza.
El uso de Champú, acondicionadores y mascarillas ecológicos, nos ofrecerán limpieza real, además de oxigenación capilar y circulatoria aportando mayor hidratación, salud y brillo a nuestro cabello manteniéndolo limpio y sin impurezas por más tiempo.
Conclusión: ¡Cuántos beneficios con un gesto tan sencillo como concienciarnos y abrirnos al cambio!
Sol Santos Navarro
Director creativo en By Sol Santos.
Experta en cosmética ecológica.
